Diogo Rocha - o fado e a poesia em pleno
Concerts - Setembro 15, 2013
En un precioso libro de Alexandra Carita y Jorge, titulado Nossos fados,
sus autores dicen del fado que “pasamos con él toda la vida. No lo
cambiamos por nada. Lo sentimos desde lejos.
Diogo Rocha - Oviedo - Espanha - 14.09.13
Calladamente. A veces, creemos conocerlo. Tenemos la sensación de que lo dominamos. Nunca. El fado se revela solo cuando quiere. Y cuando quiere mucho, nos arrebata por completo. Entra voraz, como una pasión. Y se queda para siempre. Va más allá de lo racional y nos come el alma. No tiene piedad. Y empeñados en su universo, tampoco queremos que él la tenga” Y con este fado, nada menos, se atreven en Bueño. Se arriesgaron el año pasado y el fado de Leonor Santos aconteceu, ¡Y como aconteció! en el corazón de los espectadores, entre los hórreos, los balcones y los maizales de Bueño. ¿Por qué fado en Bueño?, se pregunta la gente por ahí. “Vete y lo verás”, contesto. Porque los de Bueño saben tener el detalle con sus vecinos de origen portugués de Ferreros; porque los de Bueño son europeos, se interesan por todo el mundo y también se atreven incluso con el jazz; porque los de Bueño saben y quieren mantener las tradiciones y el fado es Patrimonio de la Humanidad.
Quizá También porque el centro geográfico y vital del fado está en el castizo barrio lisboeta de Alfama y el nombre de Alfama dicen que puede venir del árabe “refugio“ o “fuente” y Bueño es un refugio lleno de fuentes. Se podría decir que Bueño es la Alfama asturiana. Por eso hay fado en Bueño y por eso ayer al atardecer volvió “acontecer”. Estaban como protagonistas los vecinos de Bueño, en primer lugar; luego Diogo Rocha un apasionado y apasionante fadista de Alfama, que canta con la poesía popular y castiza en el corazón y una clara y rotunda voz, se acompañó de sencillez y simpatía, para dejar, entre otros, fados soberbios como el Pedro Rodrigues con la letra de “Duas lágrimas de orvalho”, o el Primavera con “Esquina de rua”, por ejemplo. También protagonistas fueron Paulo Silva, con la guitarra portuguesa y Pedro Morato con la viola de fado, músicos lisboetas que hacen fado tradicional y fado-canción e interpretaron tres guitarradas y dialogaron con la música los versos del fadista; y también nosotros, el público que vivimos el fado “em comunhão”, con “respeto” – con esa palabra nos agradeció Diogo la buena sintonía - , aplausos y algunos vítores. Hasta que aparecieron las primeras gotas de lluvia, justo cuando acababa la velada.
Xuan Bello, en dos entreactos de la actuación de los fadistas, comentó con sentimiento algunas amenas y significativas vivencias personales de su tiempo en Portugal y su amistad con escritores lusos, entre el recital de poemas de Carlos de Oliveira, Jorge de Sena, Eugenio de Andrade y de su propia autoría, utilizando el asturiano, el castellano y el portugués.
Así, entre guitarras, voz y poesía, pudimos indagar en el presente, con sentimientos y emociones, alegrías y dolores, anhelos y frustraciones, sonrisas y lágrimas saladas, que revivieron un pasado y quizá se asomaron al futuro en algún momento allí presente de éxtasis. Magnífica velada.
Ángel García Prieto
Calladamente. A veces, creemos conocerlo. Tenemos la sensación de que lo dominamos. Nunca. El fado se revela solo cuando quiere. Y cuando quiere mucho, nos arrebata por completo. Entra voraz, como una pasión. Y se queda para siempre. Va más allá de lo racional y nos come el alma. No tiene piedad. Y empeñados en su universo, tampoco queremos que él la tenga” Y con este fado, nada menos, se atreven en Bueño. Se arriesgaron el año pasado y el fado de Leonor Santos aconteceu, ¡Y como aconteció! en el corazón de los espectadores, entre los hórreos, los balcones y los maizales de Bueño. ¿Por qué fado en Bueño?, se pregunta la gente por ahí. “Vete y lo verás”, contesto. Porque los de Bueño saben tener el detalle con sus vecinos de origen portugués de Ferreros; porque los de Bueño son europeos, se interesan por todo el mundo y también se atreven incluso con el jazz; porque los de Bueño saben y quieren mantener las tradiciones y el fado es Patrimonio de la Humanidad.
Quizá También porque el centro geográfico y vital del fado está en el castizo barrio lisboeta de Alfama y el nombre de Alfama dicen que puede venir del árabe “refugio“ o “fuente” y Bueño es un refugio lleno de fuentes. Se podría decir que Bueño es la Alfama asturiana. Por eso hay fado en Bueño y por eso ayer al atardecer volvió “acontecer”. Estaban como protagonistas los vecinos de Bueño, en primer lugar; luego Diogo Rocha un apasionado y apasionante fadista de Alfama, que canta con la poesía popular y castiza en el corazón y una clara y rotunda voz, se acompañó de sencillez y simpatía, para dejar, entre otros, fados soberbios como el Pedro Rodrigues con la letra de “Duas lágrimas de orvalho”, o el Primavera con “Esquina de rua”, por ejemplo. También protagonistas fueron Paulo Silva, con la guitarra portuguesa y Pedro Morato con la viola de fado, músicos lisboetas que hacen fado tradicional y fado-canción e interpretaron tres guitarradas y dialogaron con la música los versos del fadista; y también nosotros, el público que vivimos el fado “em comunhão”, con “respeto” – con esa palabra nos agradeció Diogo la buena sintonía - , aplausos y algunos vítores. Hasta que aparecieron las primeras gotas de lluvia, justo cuando acababa la velada.
Xuan Bello, en dos entreactos de la actuación de los fadistas, comentó con sentimiento algunas amenas y significativas vivencias personales de su tiempo en Portugal y su amistad con escritores lusos, entre el recital de poemas de Carlos de Oliveira, Jorge de Sena, Eugenio de Andrade y de su propia autoría, utilizando el asturiano, el castellano y el portugués.
Así, entre guitarras, voz y poesía, pudimos indagar en el presente, con sentimientos y emociones, alegrías y dolores, anhelos y frustraciones, sonrisas y lágrimas saladas, que revivieron un pasado y quizá se asomaron al futuro en algún momento allí presente de éxtasis. Magnífica velada.
Ángel García Prieto
Related Articles
Add Comment